He encontrado entre una de las cajas que hace años arrastro con mi vida un viejo cuaderno, bueno, unos cuantos. Recordaba vagamente éste escrito, del resto no recordaba absolutamente nada. Tenía 18 años cuando vomité esto, estaba justo en la mitad de mi vida hasta la fecha y para serle fiel a la adolescente que fui, me limito a transcribir, con todas sus carencias y faltas ortográficas. Cuesta no tocarle nada, joder que si cuesta.
Un Punto de Vista
Lágrimas de acero para un corazón de hielo. Sonrisas metálikas suspendidas en un aire cargado de monóxido. Tatuajes sangrientos esperando la noche. Sal en las heridas de mi juventud. Cristales manchados con agua de lluvia. Tu nombre en blanco en paredes negras. Aviones que no ven ni vienen, días de calor, de sofocante calor. Pájaros hambrientos de basura, niños enterrados a mi alrededor, claros de luna, y montañas de amor.
Parejas que tropiezan en una canción, sabores de menta y azahar, lunas que no salen, estrellas que no brillan.
Fantasmas en los espejos de la vida, insectos aplastados por kién sabe qué; una nube de polvo no te deja ver; y ella no está para hacerte sufrir.
Guerras sucias en la puta nación.
Hambre sin color para la multitud, bombas que exigen la verdad, lazos azules ke tapan las mentiras.
Montones de rosas en forma de luz. Montones de luz en forma de rosas. Sonrisas de muerte, llantos de vida, ángeles negros que te indican el camino; gente que mira con desprecio, minorías que admiran lo bien hecho; muertos, vivos, guerras, paz, tontos, inútiles, sabios y amantes de papel.
Piernas manchadas con pintura gris, corazones acribillados por la carcoma, soldados ke disparan al coronel, viudas ke lloran sin saber por ké. Bosques de fantasía con animales que hablan; las hadas del rocío guardan un secreto. Amigos de siempre y los siempre amigos, pulseras de oro para unos pocos, de cuero para los buenos; Partidos y políticos que los tontos admiten. Reglas sin dibujo, normas imbéciles.
Un suspiro de madera para la muñeca rota; Un beso de amor para tu peor enemigo.
Balcones en un infierno para tomar el fresco, ironía, hipócritas, profesores sin cerebro, alumnos demasiado sabios, apocalipsis final, tontos del culo.
Pasiones encendidas que nunca se apagan, una buena ostia nunca viene mal, princesas de cuento y adiós al heavy metal.
Gentes como yo, ke no saben lo que dicen, escritores de paranoias, inventores de nada útil, enfermos pudriéndose en sus camas, familias destruidas, bebes que no saben de nada, disparos en la calle y un buen porro que nos calme. Pegatinas de algo raro, un calimocho bien frío y al Aznar por el kulo, un misil de akellos rusos. Banderas que no hablan, palabras que nadie escucha, aires de libertad, ya no me pueden parar.
Verdes campos en postal, papelillos de liar, padres que dicen "lo sé", ¡¡Ke coño van a saber!!. Educación, lo principal, y el que no pueda comer ke se venda por ahí. Hijos de puta a sako, buena gente (de esa hay poka), perros que ladran al aire, o quizás vean a alguien.
Miradas de amor que te arrancan del dolor, sueños cumplidos, una ilusión, pintura en el Vaticano y Sid Vicius nombrado Santo, gorritas para los pijos, piruletas y un condón, a ver quién es el guapo que se de la ostia el primero, hay que andarse con cuidado, mariposas de metal, aire de pinar y lluvia, olor a tierra mojada, edad de gloria (los 15), chicas de moda, calentorras, a todos gustan y con todos disfrutan, viva la felicidad. Tokó un grupo anoche en el bar, barricadas de alcohol, Navidad sin reyes magos, consumismo.
Persianas rotas, colores comidos por el Sol, campos de fútbol sin líneas, ídolos caidos, vinieron del Sur, reflejos rojos en el agua del lavabo, mares incendiados y música muerta, ancianos que se arrugan, los años no perdonan, un gato que no para de llamar a la puerta del infierno, susurros de las madres, saber cuando hablar y con kien, no mirar nunca hacia detrás, dejarse llevar, golondrinas negras en el pajar, gusanos de seda que explotaron al hilar, tambores de soledad, pizarras que han de olvidar, un secreto que guardar y un sueño para cumplir.
Amigos de verano, cortinas para mi dolor, un collar de marfil y una persona a la que escuchar, falso dinero manchado de sangre; mierda, montones de mierda para el que me quiera mal.
Nadie con quien hablar, una caricia tuya, fresas, frías, maduras, un vicio de los de pecar, TU BOCA, por ese me pueden condenar.
Ideas ke no terminan nunca, hojas, miles de hojas para poder llenar, tiempo que no hay, sueños, otra noche más y otro día más, al fin y al cabo, todos los días igual.