viernes, 13 de septiembre de 2013

PeNéloPe

    Penélope es mi persona favorita, aunque no exista. Con ella todo es distinto, la luz de la casa brilla como el cielo lisboeta en cualquier mañana de Diciembre. Su risa le hace un moño de ir por casa a mi esperanza y le pinta las pestañas al cansancio de no tenerla conmigo.

    Penélope es tan blanca como su alma y sus blancas manos se agarran a mi falda cuando salimos al patio de atrás a recoger moras en primavera...sus dedos se tiñen de vida violeta y mi cara de amor infinito mientras se ensucia. Si se cuela un rayo de sol y decora sus ojos frunce deliciosamente el ceño y me mira... yo hago como si no la viese y grita cuando me descubre haciéndolo de reojo y entonces la gata negra se asusta, pega un brinco y ella grita de nuevo y morimos de risa.

    Mientras Penélope duerme me acuna el corazón contemplar su pecho. Cuando me duermo la observo en sus sueños, escondida tras uno de esos árboles donde se columpia y es tan feliz como despierta, siempre me ha sorprendido que en sus sueños no haya nada que no tenga cuando no duerme, salvo ese enorme gato naranja que columpia con ella. Lo que más me gusta es cuando sueña conmigo y descubro que allí es ella quien cuida de mi, me pone flores blancas en el pelo y me lleva a la estación, nos sentamos en un banco y me pinta los labios "así estarás más guapa, por si viene".

    Penélope tiene mi alma atrapada en su latido aunque aún no lo sepa y me encharca los ojos de alegría cada vez que llora, porque sé que está viva y si ella vive yo no muero. Penélope es mi persona favorita, aunque no exista... respira en mi.


                                                       


                                                          ...no es necesario tener hij@s para ser madre.

3 comentarios:

Unknown dijo...

Me gusta. Dan ganas de colarse en vuestros sueños un rato.
Besos.

Enol dijo...

A mí me ha puesto triste. :(

Unknown dijo...

Preciosa, podía ser mi Adriana que está en el cielo con solo 6 años... tu escrito directo al corazón...